PROPÓSITO
Los propósitos de este breve documento son esencialmente dos: (a) Confirmar, empleando la prueba
científica ofrecida por los defensores de la Teoría de la
Evolución, los puntos básicos de la Teoría de la
Creación; y (b) Mostrar
las consecuencias de que cuando el hombre persiste en su
negación de Dios, sigue cometiendo los mismos errores sin aprender nada de sus
previos errores y sin importar lo dolorosas que fueron las
consecuencias.
INTRODUCCIÓN
Si uno pregunta a un grupo de gente qué vino primero, si el
huevo o la gallina, las respuestas se precipitarán como un
torrente al dar cada uno su propia respuesta "correcta". Muy
probablemente, pocos se pararán a pensar sobre el tema antes de
hablar. Y muchos, sin duda, hablarán sin tener conocimiento del
tema.
Lo mismo se aplica a los teóricos de la Creación y de la
Evolución. Si se les pregunta cuál es la teoría
correcta, responderán con la misma pasión, antes de
siquiera detenerse a pensar en los hechos que ostentan como pruebas de
sus argumentos.
DETALLES
Echemos una mirada a los hechos científicos utilizados por los
proponentes del Big Bang, dicho en un lenguaje accesible para todos:
(A)
Al principio no existía ni siquiera la "nada" ya que solo el
concepto de "espacio" da significado al concepto de "nada". No sabemos
qué es lo que había antes del Big Bang; ni siquiera tiene
sentido preguntarse dónde empezó porque cuando
ocurrió, no fue solo que la materia y la energía fueron
creadas, sino que también el espacio y el tiempo fueron creados,
así que el "donde" no existía antes.
(B) Entonces, en un instante,
el universo se formó - infinitamente pequeño, denso y
caliente. No sabemos lo que ocurrió durante los primeros
instantes después del Big Bang porque las cuatro fuerzas que hoy
determinan el comportamiento de la materia - gravedad,
electromagnetismo, fuerza nuclear "fuerte" y fuerza nuclear
"débil" - estaba unificadas, sin que sepamos descifrar los
detalles de cómo era esa unificación. Un segundo después,
cuando el Universo tenía el tamaño de un melón,
empezaron a funcionar las Leyes de la Física, probablemente en
el estado en que las conocemos hoy.
(C) Todo permaneció
oscuro hasta unos 300 mil años después, cuando la
materia se había dispersado lo suficiente en el espacio como
para liberar - en un instante
- la luz que iluminó al Universo entero.
Echemos una mirada a
los hechos bíblicos utilizados por los defensores del
Creacionismo, dicho en un lenguaje accesible:
(A) Bíblicamente
hablando, antes del principio no había nada... La
Creación no había comenzado.
(B) Al principio creó Dios el cielo y
la tierra. La tierra era confusión y caos, y tinieblas
cubrían la faz del abismo.
(C) Y dijo Dios: "Haya luz"; y hubo luz.
[(A) - (C) del Génesis
1:1-3]
Con su base
científica - Los evolucionistas proceden a "crear" seres
vivientes a partir de elementos químicos que vinieron de ninguna
parte (tal como está científicamente probado). Esto es un
problema que el hombre ni siquiera puede empezar a comprender, pues
"ninguna parte" es un término definido desde la perspectiva de
un entorno ya Creado. Es así que ese "ningún sitio" no
puede ser ni siquiera vislumbrado por la muy limitada mente humana.
Con su base bíblica - Los creacionistas proceden a
"crear" seres vivientes a partir de la interpretación literal
del Génesis. El problema es que su versión empieza a
desmoronarse incluso antes de llegar al Capítulo Tres del Libro
del Génesis. En el Génesis leemos dos historias
diferentes sobre la creación del hombre: (a) la creación
simultánea de Adán y Eva [Génesis 1:
26-28], y (b) el Adán
primero y la Eva
después salida de la costilla de Adán [Génesis
2: 7-24].
[Atención, no estamos poniendo en duda que si Dios, por ejemplo,
dijo "Haya luz", entonces se hizo la luz. Simplemente estamos poniendo
sobre la mesa dos versiones bíblicas diferentes que no se pueden
sostener simultáneamente bajo
una interpretación
literal.]
Ahora, esta diferencia posiblemente podría ser disimulada por un
predicador charlatán fundamentalista. El verdadero problema
llega cuando leemos:
"Respondióle Yahvé: Pues por
eso, cualquiera que matare a
Caín, lo pagará siete veces. Y puso Yahvé
una señal a Caín para que no lo matara quien lo hallase.
Salió entonces Caín de la presencia de Yahvé y
habitó en el país de Nod, al oriente de Edén. Conoció Caín a su
mujer, la cual concibió y dio a luz a Enoc. Y edificando
por entonces una ciudad, le dio al nombre de su hijo, Enoc." [Génesis 4: 15-17]
¿Qué gente podría matar a Caín?
Según el censo literal de población había
sólo tres personas en el mundo hasta ese momento: Adán,
Eva y Caín. Por si fuera poco, también debemos preguntar:
¿De dónde
conoció Caín a su mujer? etc.
Para entonces, los creacionistas y los evolucionistas casi con
seguridad están enzarzados en un amargo debate ignorando que, de
hecho, los evolucionistas han
probado científicamente que el núcleo de la
Teoría Creacionista es realmente cierto:
Hay realmente un Creador que creó y
que contiene al Universo que conocemos. Hay un Creador que tiene el
poder de, en un instante tan pequeño como para ser medido por el
hombre, lanzar la Creación de un sistema tan complejo, armonioso
y auto-equilibrado al que llamamos Universo y en el cual vivimos.
Ahora, cómo llama cada uno al
Creador depende de la persona, del idioma y de las tradiciones
culturales personales.
En cuanto a
"...cómo llama
cada uno al Creador depende de la persona, del idioma y de las
tradiciones culturales personales."
miguel de
Portugal dice:
Yo lo llamo Dios, maravillosamente
manifestado en tres distintas "Personas": Padre, Hijo y Espíritu
Santo. ¿Usted lo quiere llamar Alah? ¡Bien!
¿Yahvé? ¡Bien! ¿Jehová? ¡Bien!
¿Elohim? ¡Bien! Pero le digo una cosa, querido amigo, no
voy a sentarme a discutir detalles intranscendentes y mucho menos matar a quien
no crea como yo.
¿Que usted no entiende o no acepta el concepto de la Trinidad?
¡Bien! Si usted no acepta algo tan simple - tal como hemos
mostrado por la Gracia de Dios (1)
- es porque Dios desea que usted todavía no lo entienda. Todos
los que realmente conocen a Dios (y no simplemente hablan de Él)
Aman y Respetan a su prójimo y a sus creencias. Y tal como
Jesús nos enseñó, este Amor (2)
y Respeto moverá
incluso al más terco vecino a respetarte, en primer lugar, y
también a amarte después.
No olvidemos que, después de todo, "al principio" Dios
dejó muy claro que el
hombre no tiene la potestad ni la justificación para matar
a otro hombre - incluso tampoco a un malvado asesino como Caín.
Es más, Él estableció las consecuencias de una
acción así cuando dijo: cualquiera
que matare a Caín, lo pagará siete veces. [Génesis 4:15]
miguel de
Portugal concluye:
Si tengo que obedecer a alguien y vivir
de acuerdo a las leyes que ese alguien ha transmitido a la humanidad
(empleando una miríada de técnicas manifiestamente
sobrenaturales), voy a obedecer a Aquel que tiene el Poder y la
Perfecta Sabiduría para Crear este Universo y que tiene
tantísimo Amor para sostenerlo ¡a pesar de la probada
estupidez de la humanidad!
CONCLUSIÓN
No estamos diciendo que no deberíamos entender literalmente
algunas partes de las Sagradas Escrituras; de hecho,
algunas partes deben ser
entendidas literalmente tal como están escritas. Lo que
sucede es que algunas partes de las Sagradas Escrituras están
escritas de una manera alegórica para expresar al hombre de la
época algo que posiblemente no podría entender de otro
modo.
Imaginen a alguien, hace cien años, leyendo en las Sagradas
Escrituras un pasaje así: